“De todos depende que los casos de covid sigan bajando en Buenaventura”: secretaria de salud distrital

Francy Esther Candelo Murillo, la Secretaria de Salud Distrital, explica por qué Buenaventura pasó de ser el primer municipio del Valle con más pacientes positivos del nuevo coronavirus, a un modelo nacional en el manejo de la pandemia. El 90% de lo pacientes se recuperaron. Entrevista exclusiva.

Por Jesús Agualimpia – Director de Pacífico Siglo XXI

Francy Eshter Cándelo Murillo, la Secretaria de Salud de Buenaventura, nació en el Distrito el 6 de octubre de 1981, en una familia donde la academia y la educación han sido la prioridad. Francy es hija de la ingeniera industrial Delcia Murillo y del ingeniero electrónico Jesús Antonio Cándelo.

“Mi madre es de Condoto, Chocó, mi padre es de Buenaventura. Por circunstancias de la vida quien me crio fue mi abuela,  Francisca Palomeque, conocida como la maestra ‘Pacha’, y tal vez  a todo ese legado se deban mis resultados académicos. Yo nací y crecí en el barrio Kennedy, estudié en el Liceo Femenino del Pacífico, donde me gradué con honores, fui la mejor  Icfes de 1998, y estudié en la Universidad de Caldas, una entidad pública, con una beca de comunidades negras. Soy médica egresada de esta institución”, cuenta Francy.

Una vez terminó sus estudios, regresó a Buenaventura para ejercer la medicina en Comfamar. Francy hacía parte del equipo de galenos del área de urgencias.  También ingresó al Hospital Departamental de Buenaventura, en la unidad renal, y en el Luis Ablanque de la Plata en el puesto de salud La Playita.

“Trabajé por mucho tiempo en el área de urgencias, posteriormente ingresé a Comfandi, donde fui incursionando en la parte administrativa. Realicé mi especialización en auditoría médica y también hice una especialización en salud pública y epidemiologia”, continúa Francy, cuyos conocimientos los pone ahora a disposición de uno de los retos más importantes de la ciudad en toda su historia: enfrentar el nuevo coronavirus como Secretaria de Salud en la alcaldía de Víctor Hugo Vidal. ¿Cómo ha logrado el éxito en el manejo de la pandemia?  Fue lo que intentamos averiguar en esta entrevista exclusiva con Pacífico Siglo XXI.

¿Cómo encontró a la Secretaría de Salud al asumir el cargo?

En varios aspectos se requería mayor organización. Cuando llegamos encontramos parte de la estructura de la Secretaría de Salud en  malas condiciones de higiene, sin servicios sanitarios.

Además, la información que nos suministraron durante el empalme no fue la mejor, había muchos vacíos. Cuando fuimos a mirar los archivos de gestión documental de la Secretaría encontramos unos documentos en una terraza, todos en bolsas negras, la organización de la ‘memoria’ de la Secretaría no era la mejor. De esa manera no se pudo dar una respuesta a unos requerimientos del Ministerio de Salud.  Era complicada la situación.

¿Qué gestión se hizo en este contexto?

Empezamos a organizar todos los trámites administrativos para acondicionar las instalaciones de la Secretaría de Salud, porque en la medida en que ordenamos la casa, se da una mejor respuesta. Otra gestión fue el personal. Encontramos una Secretaría de Salud sin personal.  En este momento el despacho funciona con 180 funcionarios para cumplir con sus procesos misionales en salud pública, prestación de servicios, participación social, emergencias y desastres y la parte administrativa. Nuestro objetivo es la excelencia en la atención para la satisfacción del usuario. Esa es la apuesta.

¿Cómo se distribuyen estos funcionarios?

De los 180 funcionarios con los que contamos, 26 son entre técnicos y los profesionales que están nombrados o en carrera administrativa en provisionalidad. Los otros 150 son contratistas. Más del 80% de los trabajadores son contratistas, por eso uno de nuestros objetivos  es la reestructuración administrativa y operativa de la Secretaría. Estamos en una edificación que no es propia, pagando un arriendo, venimos de una edificación que no era la mejor, entonces estamos trabajando para tener sede propia, tenemos un plan para ubicar la sede donde funcionan las instalaciones de malaria, porque ese es un terreno del Distrito. Ahí podemos estructurar la Secretaría de Salud como debe ser. La apuesta  es grande: reformar tanto administrativamente, como en la parte de infraestructura, el despacho.

Otro reto fue la pandemia de coronavirus. ¿Qué se hizo para enfrentar al covid?

Una vez declarada la pandemia por parte de la OMS el 30 de enero, se declaró la emergencia en salud pública. Nosotros hicimos un plan de acción, un plan de contingencia en el cual dividimos tres etapas.

La primera etapa la llamamos ‘preparación’. Consistía en capacitar a toda la población sobre qué era el nuevo coronavirus, cómo se transmitía. Aún no teníamos el primer contagio en Colombia, pero desde la Secretaría nos adelantamos al escenario más probable, que era la llegada del virus al país.

Salimos a las calles a decirle a la gente cómo debía cuidarse:  lavarse las manos, usar tapaboca, mantener una distancia de dos metros con el otro. La segunda etapa fue la de ‘atención’ o ‘contención’.  Sucedió en marzo, cuando entró el virus al país. En esta etapa fortalecimos los servicios de salud. La Administración Distrital proveyó unos recursos para el fortalecimiento de la infraestructura y fue cuando se crearon  las ‘salas covid’ en la ESE y se fortaleció el hospital San Agustín en la zona rural para la atención de la población.

También salimos a hacer pruebas, controles en los puntos de entrada de la ciudad como Loboguerrero, Cisneros, la Sociedad Portuaria, el aeropuerto. La tercera etapa, por último, es la de ‘mitigación’. Comenzó cuando tuvimos el primer caso de Covid–19  en el Distrito, el 4 de abril.  Fue un estudiante. Seguimos, de la mano del Alcalde Vidal y todo el personal de salud, trabajando para mitigar el impacto del virus en el Distrito.

¿Qué dificultades enfrentaron?

Cuando empezamos a tomar las pruebas, teníamos un gran limitante: no las procesábamos aquí, las teníamos que mandar al Instituto Nacional de Salud, en Bogotá, lo que retrasaba el proceso.

Algunas pruebas iban mal rotuladas. Era un problema de todo el país. O las pruebas no llegaban, entonces muchas  no se podían procesar. Pero el balance global es positivo. Hemos hecho alrededor de 8000 pruebas.

¿Cómo es el seguimiento de los casos positivos por parte de la Secretaría de Salud?

Una vez se detecta el caso positivo, las EPS hacen el cerco epidemiológico. Nuestra responsabilidad es colectiva (hacer pruebas masivas), y de las EPS individual.

¿En Buenaventura tenemos rebrote?

No, en Buenaventura aún no, pero en otras partes del mundo y en algunas ciudades de Colombia volvieron a aumentar los casos positivos. Ese rebrote depende del comportamiento y cómo nosotros asumamos el contagio por Covid-19.

Esto tiene que enseñarnos que nuestra forma de vida y de relacionarnos tiene que cambiar. De todos los bonaverenses depende que los casos positivos no crezcan en la ciudad. Aunque hago un llamado al Gobierno Nacional y Departamental: en Buenaventura no tenemos agua potable  y esto  agudiza el problema del virus.

¿Cómo está la ciudad hoy frente al Covid-19 en términos estadísticos?

A partir de todas las estrategias que se tomaron desde la Administración Distrital se logró que el impacto del covid en la ciudad fuera menor.

En el distrito hemos reportado hasta este 7 de diciembre 2930 casos de covid-19, estamos hablando de un porcentaje de la población muy bajo con respecto a Colombia.

En el Valle del Cauca éramos el primer municipio con más casos por números de habitantes, hoy somos el tercero con población con más contagio. De esos 2930 casos que tenemos, 2678 se recuperaron, más del 90% de los casos. El porcentaje de pacientes que han requerido hospitalización ya sea en sala general o en UCI, ha sido menor del 10%.

¿Cuántas fueron las UCI que se instalaron en Buenaventura?

Cuando nosotros llegamos a esta administración, el Distrito tenía capacidad en UCI de solo 10 camas, que están en la clínica privada. Hoy tenemos 55 camas UCI en el Distrito de Buenaventura, de esas 55, 33 se asignaron para covid, 13 en el hospital y 20 en la clínica Santa Sofía, las otras 22 camas son para no covid, 10 en la clínica y 12 en la nueva sala  UCI del hospital Luis Ablanque de la Plata.

¿Cuánta gente ha muerto de covid?

Hoy tenemos 186 muertos por covid en Buenaventura. Algunos murieron en la ciudad, otros en Cali, Buga, Tuluá. Debemos seguir cuidándonos, insisto, sobre todo en las fiestas de diciembre. Se debe celebrar con responsabilidad.

¿A partir de ahora, qué sigue en el plan?

El proceso de la etapa de mitigación, seguir bajando los casos de contagio, ojalá llevarlos a cero, y a partir de ahí trabajar en las secuelas que nos dejaron esos casos, eso es lo que sigue en el marco de Covid -19. Para no sumar más casos estamos implementando una estrategia con el Ministerio de Salud, consiste en hacer muchas pruebas rápidas, que toda persona que tenga síntomas acuda a los servicios de salud y descarte si tiene o no covid para hacer el cerco epidemiológico.

Pasando a otros temas, ¿cuál es la mayor deficiencia en salud que tiene Buenaventura?

Entre las mayores deficiencias está la infraestructura en salud, porque a pesar de que hemos avanzado en capacidad instalada, solamente hemos intervenido 6 de los 23 puestos de salud que tenemos.

También hay una gran deficiencia en talento humano en salud. En Buenaventura tenemos 0.4 médicos por cada mil habitantes, no llegamos a un médico por mil habitantes, y eso debe cambiar pronto. Otra deficiencia que tenemos en salud es la parte cultural, no tenemos conciencia sobre la importancia de la prevención, del ejercicio, de la alimentación saludable, de los hábitos saludables.

Entre las principales enfermedades que padecemos, la primera es la hipertensión arterial, después la diabetes, las enfermedades transmitidas por vectores, la malaria y el dengue son prevalentes en nuestro territorio. Igualmente, la enfermedad diarreica aguda, y esto tiene mucho que ver con la potabilización del agua y las medidas de higiene.

En cuanto a la infección respiratoria aguda, tiene que ver mucho con nuestros cambios de clima. Esas son las principales enfermedades en Buenaventura, y por eso la prevención y los hábitos saludables son fundamentales para prevenirlas. Se debe generar esa conciencia del autocuidado. Y seguir las medidas de bioseguridad para reducir el riesgo de contagio por covid.

Para finalizar, ¿cuáles son las medidas para fin de año con respecto a la pandemia?

Evitar aglomeraciones, el cierre de sitios donde se acumule mucho personal y no cumplan la norma. Todo lo que haga mayor propagación del virus lo vamos a evitar. También vamos a continuar con el fortalecimiento de los servicios de salud y la cultura ciudadana, que la comunidad acuda a los servicios de salud si presenta cualquier síntoma, queremos llevar ese servicio de salud implementando un cronograma de estrategias de intervención en las comunas.

“Velar por el bienestar social de las comunidades es mi vocación”

El concejal del partido Liberal, Johan Fernando Valencia, explica que la pandemia no ha sido impedimento para que la Corporación ejerza el control político. Asegura que el Concejo busca trabajar junto al alcalde y los secretarios de despacho para promover los proyectos que solucionen las problemáticas que padecen los bonaverenses.

Desde niño, dice el concejal del partido Liberal Johan Fernando Valencia, descubrió que su vocación era ayudar al otro. Por eso se lanzó a la política. Por eso, también, actualmente hace parte de la Comisión Cuarta del Concejo, que precisamente trata los temas sociales: salud, educación, vivienda digna, servicios públicos, entre otros. Desde allí, Johan, que también es el presidente del Directorio Distrital del partido Liberal, busca impulsar los proyectos consignados en el Plan de Desarrollo que le apuestan a mejorar la calidad de vida de los bonaverenses.
Sin embargo, aclara que aquel es un trabajo colectivo, “en bloque”, de todos los concejales. “Vamos a reivindicar a la Corporación. Es un objetivo colectivo que nos hemos trazado”.

Concejal Valencia, ¿cuál es su balance hasta el momento de su trabajo en el Concejo?
Lo primero que hay que manifestar es que el trabajo en el Concejo no es de una sola persona, no es individual, por el contrario, en la Corporación le apostamos al trabajo en equipo. En ese sentido, los ediles acordamos trabajar en bloque en torno a un objetivo, que consiste en reivindicar al Concejo ante los ojos de la ciudadanía.

¿Qué se ha hecho para lograr esa meta?
Hemos hecho unos ejercicios 100% participativos, democráticos, donde inicialmente logramos en los primeros días hacer la elección del Personero y el Contralor del Distrito de Buenaventura. Posteriormente radicamos en bloque una proposición de control político a la Administración para revisar cómo se había dejado a la alcaldía, teniendo en cuenta el empalme entre el mandatario saliente y el entrante, y conocer la hoja de vida y experiencia de los nuevos funcionarios y lo que sería su plan de gestión en las diferentes dependencias. También trabajamos el Plan de Desarrollo Distrital, en el que la Corporación hizo el ejercicio de retroalimentación al documento inicial que presentó la Administración. Los concejales sumamos propuestas para su mejora y al final eso permitió consolidar un Plan de Desarrollo acorde a las necesidades apremiantes de Buenaventura.

Sin embargo apareció la pandemia…
Así es. El Concejo ha estado atento a los planes de manejo del coronavirus en el Distrito. Por eso desde la Comisión Social del Concejo, a la cual pertenezco, establecimos inicialmente una sesión de control político a la Secretaría de Salud y lógicamente al director en aquel entonces del hospital Luis Ablanque la Plata, para saber cuáles eran los planes de contingencia que se estaban llevando a cabo por parte de la Administración para mitigar los efectos de la pandemia. Desde la Corporación, en resumen, hemos establecido una hoja de ruta clara, concisa, y hemos hecho el acompañamiento constante a los funcionarios, no hemos hablado de críticas, sino que hemos hablado de construir juntos.

¿Cuáles fueron las iniciativas más importantes que fueron aprobadas hasta octubre de 2020?
El primer proyecto de acuerdo que se aprobó en el Concejo tiene que ver con la adopción de la estrategia para la política pública de economía naranja, teniendo en cuenta que la economía naranja es una de las banderas del Gobierno Nacional. Ese es un trabajo que se estableció en cabeza de uno de los honorables concejales y en el cual la gran mayoría de los ediles contribuimos para que fuese una realidad en Buenaventura. Posteriormente siguió el estudio y aprobación del Plan de Desarrollo ya mencionado. En ese mismo orden de ideas, dimos aprobación al proyecto que presentó la Administración con el que buscaba las facultades para la modificación del presupuesto para el año 2020, y que la Alcaldía pudiese culminar el año con la flexibilidad en términos presupuestales. Igualmente dimos aprobación al proyecto que buscaba la descentralización de recursos económicos para los Fondos de Desarrollo Local, que funcionan en cada una de las localidades y que prácticamente son la posibilidad real que tienen los alcaldes menores y los ediles de realizar sus planes de acción, sus planes de desarrollo locales.

¿Qué proyectos siguen pendientes para ser aprobados?
Efectivamente hay proyectos a los que la Alcaldía les debe realizar algunos ajustes, uno de ellos es el proyecto que crea la administración para la plaza de mercado, al igual que el proyecto que crea la Oficina de la Gestión de Paz. Y se debe definir el Plan de Desarrollo Rural y Agropecuario en el Distrito de Buenaventura. De otro lado, ya comenzamos con el estudio del presupuesto de 2021 que fue presentado por la Administración Distrital.

¿Cuál es su plan bandera en el Concejo?
Es válido precisar que me lancé a la Corporación con un lema que promulga la inclusión y el bienestar social y trabajar por ello es mi bandera en el Concejo. Precisamente hago parte de la Comisión Cuarta del Concejo, la comisión social, donde se tocan los temas de salud, educación, servicios públicos, vivienda digna, derechos humanos, los asuntos que tienen que ver a diario con el bienestar de los ciudadanos. Velar por el bienestar social de las comunidades es mi vocación.

Para finalizar, usted hace parte del partido Liberal, uno de sus dirigentes en Buenaventura. ¿Cómo está el partido en estos tiempos de polarización política?
Antes quisiera contarle que el pasado 10 de julio de 2020 y de manera virtual, el partido Liberal Colombiano eligió la nueva junta directiva en el Distrito Buenaventura, y fui elegido por la asamblea por segunda vez como presidente del Directorio Distrital Liberal.
Me acompañan en esta tarea el edil Lader Mauricio Riascos, de la localidad número uno, como vicepresidente, y el edil Larry Fernando Vázquez Ocoró, de la localidad número 2, como secretario general. Se debe ponderar también que dentro de las elecciones se eligió a nuestro diputado amigo, el doctor Carlos Hurtado Vela, como veedor del partido en el Distrito Buenaventura. Al llegar nuevamente a la presidencia del partido, nos proponemos consolidarnos como la fuerza política que Buenaventura necesita. Los bonaverenses se identifican con el liberalismo.

“Buenaventura necesita que los bonaverenses se pongan al día con sus impuestos”

Por Jesús Agualimpia
Director Pacífico Siglo XXI

Manuel Vallecilla, el director financiero del distrito, explica la delicada situación de las finanzas de la alcaldía, cuyo déficit, silencioso, ha venido creciendo en los últimos años. Asegura sin embargo que el plan diseñado para superar esta situación incluye la recuperación de la confianza de los contribuyentes. “Cada ciudadano puede estar seguro que todo peso que pague por impuestos se verá reflejado en el bienestar social”. Entrevista exclusiva.

Manuel Vallecilla, el actual director financiero de la alcaldía de Buenaventura, es un experto en economía y finanzas. Se graduó de la facultad de economía de la Universidad del Valle, y enseguida cursó una especialización en administración en la Universidad Javeriana. Además, adelantó otros estudios en algunas instituciones tanto de Colombia como de Canadá.
Entre su experiencia laboral se destaca el hecho de que ha pasado por el sector público, el privado y ONG’S, lo que le da una amplia experiencia para enfrentar el reto que asumió desde enero de 2020: dirigir las finanzas de una Alcaldía que atraviesa una complicada situación económica, agudizada tras la pandemia del coronavirus.

¿En qué estado se encontraba la dirección financiera de la alcaldía cuando asumió el cargo?
En la administración anterior, en cabeza de quien ejercía como directora financiera, se hizo un gran esfuerzo intelectual en el sentido de analizar la situación financiera del distrito de Buenaventura. Por ello se planteó la necesidad de acogerse seriamente a un programa de saneamiento. Es decir: antes de que yo asumiera el cargo ya había unas señales que indicaban que el distrito tenía serias dificultades en el orden económico.

¿En qué sentido?
Desde el año 2008 el distrito fue acumulando un déficit silencioso, que se traduce en la brecha que hay en los compromisos que se asumen y en los pagos. Una brecha que se agranda con las demandas que se tienen pendientes y las demandas que han sido falladas en contra.
A 31 de diciembre de 2019, por ejemplo, en Buenaventura había unas cuentas por pagar y sin apalancamiento económico de $2.018 millones. Son deudas de la administración distrital pasada que nos toca asumir. De igual forma, a 31 de diciembre, según el informe de la dirección jurídica, se tenían deudas por demandas falladas en contra por $351.000 millones. Además, hay otras pretensiones de demandas en contra del distrito que, en caso de fallos adversos, representarían una deuda de $1.2 billones para Buenaventura.

¿Esto quiere decir que a futuro los recursos del distrito están comprometidos con estas demandas?
Esto quiere decir que si hacemos un ejercicio con un escenario optimista, basado en el trabajo formidable que ha adelantado la oficina jurídica, y planteando que tenemos un porcentaje de éxito de esas demandas del 70%, nos queda un 30% de ese $1.2 billones como pasivo contingente, que suma $337.000 millones aproximadamente. Se aclara que, como son pretensiones, se trata de una cifra estimada, que puede bajar, pero se debe trabajar sobre la información que se tiene. Mirando el pasivo, es decir lo que ya está causado, las deudas y lo que son demandas falladas en contra del distrito, y le sumamos el pasivo contingente, el distrito se acerca a unas obligaciones potenciales de $900.000 millones. Reitero, no quiere decir que esos $900.000 millones sean deudas que tiene hoy el distrito, pero representan la suma de lo cierto junto con el pasivo contingente que necesariamente hay que tener en cuenta a la hora de proyectar al momento de establecer estrategias para el saneamiento fiscal. Esta es una radiografía muy global de la situación fiscal del distrito.

¿Ese déficit cuánto representa del recaudo total de la ciudad?
Haciendo una comparación del déficit, corresponde a casi cinco veces lo que se recaudó en ingresos de libre destinación en el 2019.
Es decir: si ese recaudo se dedicara exclusivamente al pago de estas obligaciones, tendríamos que tomar el presupuesto de cinco años para sanear ese pasivo que hoy tenemos por deudas y demandas falladas en contra.

Frente al presupuesto, ¿cuáles son los rubros que más se afectan para la buena marcha del distrito teniendo en cuesta este déficit?
Es una pregunta muy oportuna porque, ¿con qué se paga el déficit? Se debe pagar con los recursos propios del distrito y estos recursos tienen que ver fundamentalmente con los ingresos que se generan por predial y algunos recursos de capital como los dividendos de la ciudad y unos recursos no tributarios por el uso de playas y bajamares que tiene el distrito.
Igualmente, esos recursos son los que se utilizan para el funcionamiento y el día a día de la administración, es decir que con estos recursos se pagan también los gastos de funcionamiento, salarios, gastos generales, transferencias, las mesadas pensionales, esa la problemática.

¿A cuánto asciende el presupuesto de Buenaventura y cuánto se destina para inversión social y otros temas?
La vigencia anterior fue de aproximadamente $620.000 millones, de estos, $109.000 millones fueron ingresos corrientes de libre destinación. Con estos valores tenemos que pagar nuestros gastos de funcionamiento y el servicio de la deuda que está apalancada con estos recursos propios. Contamos con unos gastos de funcionamiento aproximados de $89.000 millones, incluyendo las transferencias. Hago la claridad: lo que nos sobra (luego de pagar el funcionamiento) para el pago del déficit es muy poco teniendo en cuenta la magnitud de la deuda. Por eso hay que hacer un plan de saneamiento.

¿No hay un fondo específico para pagar el déficit?
El distrito hoy no cuenta con un fondo para pagar el déficit, por eso se requiere un plan de saneamiento. Una alternativa es llevar esas deudas a la Ley 550, para suspender todos los procesos que se puedan generar en contra y el distrito realice un plan de pagos que le permita cancelar a mediano y largo plazo. El tamaño del pasivo es de $565.000 millones, es muy alto en comparación con los ingresos corrientes de libre destinación y por lo tanto se requiere ese plan de saneamiento.

¿Dónde está la acuciosidad del distrito para encontrar los recursos y poder darle solución al déficit, qué han planeado al respecto?
Se ha planteado el plan de saneamiento y lo he manifestado públicamente, es un plan que va más allá de conseguir recursos y diferir la deuda a 20 años para poder pagarla. Lo que se quiere es fortalecer al distrito en cuatro áreas: organizacional, tecnología, el fortalecimiento de renta y un manejo fiscal prudente, de tal manera que los gastos y los compromisos que se hagan en cada vigencia con ingresos de libre destinación, nunca superen los recaudos reales del distrito.

De allí surge un tema fundamental: ¿cómo mejorar el recaudo?
Necesitamos tecnología. Por ejemplo, el recaudo en el sector residencial por impuesto predial no supera el 15%, entonces el esfuerzo que se hace en predial recae sobre unas pocas empresas. Esa es la base que se tiene, pero hay un potencial grande que nosotros podemos recuperar si hacemos fiscalización, y para hacerlo se requiere tecnología.
Lo segundo, en la parte de mejoramiento de ingresos debemos hacer énfasis en recursos por rentas que hoy no le hemos dado la importancia que merece y que puede tener un gran potencial. Fiscalizar acuciosamente aparte del predial e industria y comercio otras rentas como la sobretasa a la gasolina, industria y comercio al sector transportador, al sector de telecomunicaciones, tenemos que mejorar significativamente el recaudo en alumbrado, creemos que allí también hay un potencial importante y que hoy estamos perdiendo unos recursos considerables. Igualmente tenemos que ser capaces de blindar al distrito de los fraudes y consolidar una política fiscal sana, austera, que tiene que complementarse con un programa agresivo de fiscalización y un programa de modernización

Por cierto: ¿cuántos funcionarios tiene la alcaldía?
La nómina, más las mesadas pensionales, nos cuesta aproximadamente $3.200 millones al mes, incluyendo seguridad social, parafiscales y demás. Tenemos aproximadamente 475 funcionarios, más el personal pensionado.

¿Cuánto se está recibiendo hoy por dividendos de la Sociedad Portuaria?
Entre los dividendos y la contraprestación por playas y bajamares, Buenaventura recibió en la vigencia 2016 – 2017 aproximadamente $33.000 millones. Luego bajó a $27.000 millones, siguió bajando a $18.000 mil, $12.000, llegando al año pasado apenas a $6.000 mil millones. Para este año no esperamos que por la suma de esos dos rubros lleguemos a recibir $5.000 o $6.000 millones. Este es otro impacto importante que ha golpeado fuertemente las finanzas del distrito. Y a eso hay que agregarle el impacto de la pandemia.

¿En qué sentido?
Por ejemplo, los ingresos de industria y comercio van a sufrir mucho porque se calculan con los ingresos de las empresas, y la economía se va a desacelerar entre el 2% y el 4%. Además, como la contraprestación depende del movimiento de carga, el confinamiento que vivimos hace unos meses también afectará esa contraprestación que recibe el distrito mes a mes. Y hay un factor adicional, y es que en el año 2021 iniciamos el pago de intereses del crédito de los $25.000 millones que se hizo en el mes de diciembre, por el concepto de los lotes. Es decir: en el post confinamiento tenemos que prepararnos porque hay unos gastos adicionales de unos $3.500 millones en el año que se deben cubrir de los recaudos que recibimos.

¿Qué tipo de incentivos se tienen planeados para los contribuyentes y mejorar el recaudo de impuestos en la ciudad?
Mi experiencia indica que la mejor estrategia para estimular a las personas a que paguen los impuestos es la confianza, que estén seguras que lo que pagan se revierte en servicios sociales. Es fundamental que las personas recuperen la confianza en la institucionalidad, y es algo que vamos a lograr. De otro lado el gobierno distrital, a pesar de toda su limitación financiera, acogió el decreto 678 del gobierno nacional y establecimos unos estímulos. Hasta el 31 de octubre, por ejemplo, el estímulo abarca el 20% del capital y el 100% de los intereses de mora.
Y a partir del 1 de noviembre hasta el 31 de mayo del 2021, le reconocemos como estimulo el 10% del capital y continua el 100% de las excepciones para sanciones y multas.

¿Cuánto cuesta el plan de desarrollo del distrito?
Está calculado en $2.2 billones. Una parte importante de esos recursos se destinarán a lo que hemos llamado la ‘revolución de la salud’ y también la ‘revolución de la educación’. Tenemos unas inversiones proyectadas de $1.7 billones en el periodo de gobierno de la Buenaventura con Dignidad.

¿Qué se está haciendo por el empleo?
Aparte de fortalecer la fiscalización, toca hacer una cosa vital, y es mirar cómo ampliamos la base tributaria, lo cual significa atraer inversión importante, de largo plazo, y para ello se requiere ser competitivos con las ciudades circundantes y con ciudades que tengan características similares a Buenaventura. En ese sentido, en coordinación con la Secretaría de Desarrollo Económico, la Alcaldía y la Cámara de Comercio, vamos a iniciar un estudio que nos permitirá definir un programa de estímulo para la creación de nuevas empresas. Estoy seguro que pese a todos los problemas que enfrentamos, hemos diseñado un plan serio que nos permitirá transformar esta realidad. Vamos por buen camino.


Parte del equipo de trabajo de la dirección financiera del distrito.

La Dirección Financiera de Buenaventura, dirigida por Manuel Vallecilla, cuenta con un equipo de trabajo conformado por profesionales de las áreas de finanzas, economía, contaduría, administración, derecho.

Su objetivo, además de mejorar el recaudo de impuestos en la ciudad y elaborar un plan de saneamiento de las deudas, es fortalecer al distrito en cuatro áreas: organizacional, tecnología, el fortalecimiento de renta y un manejo fiscal prudente, “de tal manera que los gastos y los compromisos que se hagan en cada vigencia con ingresos de libre destinación, nunca superen los recaudos reales del distrito”, explica Manuel.

“El déficit económico es muy preocupante, pero vamos por buen camino para superarlo”

Por Jesús Agualimpia
Director Pacífico Siglo XXI

El alcalde Víctor Hugo Vidal hace un balance de lo que ha sido su gestión en medio de la pandemia por el coronavirus. El déficit económico que traía la ciudad sería de casi el 30% del presupuesto anual. Reducción de gastos y total austeridad, parte del plan para superarlo. Manejo del Covid-19 hoy es ejemplo a nivel nacional.

El alcalde Víctor Hugo Vidal no le da rodeos al asunto: el déficit que hoy afronta la administración distrital es de los más altos de la historia. Se trata de una deuda que representa el 30% del presupuesto anual de Buenaventura. Demandas perdidas, errores de contratación, entre otras, son algunas de las explicaciones a esta crisis que tiene a la ciudad en una ‘UCI’ económica.
Sin embargo, no todas son malas noticias. Los últimos informes indican que la ciudad ha manejado de buena manera la pandemia por Covid-19 -los recuperados superan el 80%- aunque no se puede bajar la guardia. Continuar con las medidas de bioseguridad es clave para mantener la reapertura económica que tanto requiere el Distrito.

Alcalde, ¿qué análisis hace de lo que ha sido su administración en este 2020 tan particular con la pandemia del Covid-19? ¿Cómo va su gestión?
Vamos bien, en la medida de las posibilidades. Sabemos que estamos en tiempos difíciles. Encontramos una administración muy complicada, muy enredada, llena de problemas y además nos ha tocado, de los diez meses que vamos a cumplir en el cargo, siete en pandemia.  Eso cambia cualquier plan, pero considero que el balance es muy positivo. Las situaciones que nos hemos encontrado las hemos enfrentado con el liderazgo que requerían, entre ellas la misma pandemia. Gracias a Dios las cifras al respecto ya son muy favorables. De hecho, Buenaventura es un municipio ejemplo a nivel nacional en cuanto al manejo del coronavirus. Eso me deja muy tranquilo, aunque no podemos bajar la guardia en cuanto a las medidas de bioseguridad. Y soy consciente que falta mucho por hacer en diferentes frentes.

¿Cuál es la realidad sobre el déficit económico de la alcaldía?
Tenemos un déficit que está sobre los $230 mil millones, así lo encontramos en enero, cuando asumí el cargo. Es una situación muy complicada para Buenaventura. Se trata de una cifra que representa alrededor del 30%, incluso un poco más, del presupuesto anual de la ciudad. Es muy grave. Hay una gran cantidad de cuentas por pagar a bancos, o por demandas impresionantes, o cuentas pendientes por prestación de servicios de nómina, en fin. Hay una serie de elementos que constituyen un déficit importantísimo y que se vuelve un desafío muy grande para el Distrito.

¿Cuál fue el rubro que más afectó las finanzas?
Hay varios, sobre todo muchas sentencias pérdidas en contra del Distrito, muchos embargos, en especial por tutelas y demandas laborales. También muchas cuentas por pagar por obras realizadas en el Distrito. La verdad uno no entiende cómo se planificó y se administró a Buenaventura, con el agravante de que el Distrito carecía de defensa jurídica. No había demanda que el Distrito ganara y eso explica gran parte del déficit.

¿Entonces el equipo jurídico qué hacía?
No sé, y es muy buena pregunta, porque fueron muchos casos que el Distrito perdió sin dar la batalla jurídica. Hay un caso que pongo como ejemplo, una conciliación. El demandante pretende $11 mil millones, concilia con el Distrito, y el distrito se compromete a pagarle $11 mil millones. Entonces no existió conciliación, la forma de pago, tal vez, ya que se comprometió a pagarle en dos cuotas. Pero son actuaciones muy extrañas que deben investigarse. Estamos en ello.

¿Qué pasó con los funcionarios que usted encontró al llegar a la Administración?
Es un tema que llama la atención. Sabemos que el Distrito intentó hacer una reestructuración de su planta de personal, nombró unos funcionarios y promovió a una buena cantidad de personas que ya venían trabajando.
Sin embargo, hubo maniobras en ese proceso que nos parecieron ilegales. Nos encontramos con más de cien funcionarios nombrados en diferentes cargos sin cumplirse el requisito primordial de ese proyecto, que era la aprobación del Concejo. De esta manera el costo de funcionamiento del Distrito aumentó considerablemente, sin justificación clara.

El decreto de esos nombramientos y ascensos lo tumbaron. ¿Qué pasó con eso?
Nosotros revocamos la medida. Se nos vino un desfile de tutelas que por fortuna pudimos responder, una a una. Defendimos como se debía los intereses de Buenaventura.

¿Cuál es la estrategia para corregir esta situación?
Es una estrategia muy amplia. El plan primordial consiste en restringir los gastos al máximo, porque estamos en ese déficit tan alto. También estamos consolidando una defensa jurídica para el Distrito ante las demandas. Igualmente se va a negociar con los demandantes y levantar algunos embargos. Estamos haciendo todas las gestiones correspondientes para que la administración salga adelante de esta crisis financiera.

Por cierto, ¿los $45 mil millones de Invías por concepto del impuesto predial del predio donde funciona la Sociedad Portuaria quién los paga?
Menos mal que yo lo dije mucho antes, y haciendo nuestros estudios, revisiones y escuchando a mucha gente que conoce la materia, es un dinero que debe pagar Invías, porque ellos son los propietarios del bien o inmueble donde funciona la Sociedad Portuaria y, según la norma, cuando se hizo la última concesión no se incorporó ese pago. Entonces sobre la marcha no se pueden cambiar las condiciones a la contraparte en un contrato de concesión. De manera que tenemos claro que es Invías el que debe hacer el pago y nos estamos moviendo para exigirlo.

¿Cuál es la estrategia para el pago de impuestos por parte de los bonaverenses?
Nosotros hemos mandando un mensaje muy claro a los ciudadanos sobre la importancia del pago de los impuestos. También hemos ofrecido facilidades para beneficiar el bolsillo de los bonaverenses. Tenemos un descuento del 20% del capital, más intereses. Es fundamental para las finanzas del Distrito el recaudo de estos recursos con los que podemos generar desarrollo para todos.

¿Cómo está la ciudad en materia de salud?
Desde hace muchos años la situación de la salud en Buenaventura es pésima, los indicadores de salud son terribles. En 2019 tuvimos 13 muertes maternas, cuando la meta es cero. Eso es gravísimo. Estamos entre los peores indicadores del mundo. En el primer trimestre de 2020 tuvimos otras dos muertes maternas, que me dolieron mucho. Esto no puede pasar en estos tiempos, pero obviamente comparado con el año pasado, se ha ido mejorando en este aspecto. De otro lado, sobre el Covid-19, las cifras son muy positivas. El nivel de recuperación de los contagiados supera el 80%, es un dato que nos ubica en los primeros lugares a nivel nacional. En los últimos meses nuestro índice de contagio disminuyó a un promedio muy bajo, llegamos a tener un día sin un solo reporte de fallecidos o contagios. Nuestros índices de mortalidad por coronavirus disminuyeron de forma considerable.

Pero se vivieron semanas muy angustiantes…
Así es. Entre abril, mayo y junio tuvimos semanas muy complicadas por el Covid–19. Pero de julio en adelante fuimos mejorando.
Además hay que decir que la pandemia nos sirvió mucho para mejorar nuestra infraestructura en salud, tenemos un hospital no diez puntos, pero si en un buen puntaje de competitividad. De hecho inauguramos nuestra sala de UCI. Por primera vez Buenaventura tiene una sala UCI pública. Desde esa perspectiva, en salud dimos unos pasos gigantes que no esperábamos dar en el primer año, pero duelen mucho los muertos por el Covid-19.

¿Cuántas camas de UCI tienen?
En este momento 25 camas UCI, para beneficiar a más de 500 mil personas de Buenaventura y el Pacífico en esta pandemia. Recibimos 13 ventiladores por parte del Ministerio de Salud y Protección Social, más 12 que fueron adquiridos con recursos de regalías.

¿Cómo se logró esta sala UCI?
Por gestión de la Alcaldía. El Ministerio de Salud nos aportó también esos 13 ventiladores. Destinamos recursos propios de la Administración, recursos de la Secretaría de Salud, y recursos de regalías. Además de la UCI se instaló la red contra incendios. Repito: aún no es el hospital diez puntos con el que soñamos, pero tiene la capacidad para atender de buena manera a los bonaverenses.

¿Qué servicios presta el hospital?
Varios servicios, pero quiero destacar sobre todo partos. Se habilitó hace tres meses. Ya hemos hecho más de cien partos, con total seguridad, a diferencia de lo que venía pasando. El hospital hoy está bastante posicionado, ya tenemos dos ambulancias medicalizadas, las cosas han ido mejorando. Los bonaverenses nos merecemos un centro de salud de primera, poco a poco lo hemos ido logrando.

Teniendo en cuenta el panorama, ¿cómo mejorar la economía de la ciudad y que esto se vea reflejado en la calidad de vida de los bonaverenses?
Para lograrlo es claro que desde la alcaldía debemos liderar procesos, generar confianza para que lleguen inversionistas que le apuesten a Buenaventura. Igualmente desde la Alcaldía se debe invertir, en su momento. Por ahora no tenemos con qué, es cierto. Pero es clave generar un entorno para que otros actores se animen a invertir, generar confianza en el pequeño productor, en el emprendedor, pero también en los grandes empresarios, teniendo en cuenta la responsabilidad ambiental, social, el empleo local. Un empleo que debe ser de calidad. Como alcalde, mi oficina siempre estará abierta para escuchar y apoyar a todo aquel que vea en Buenaventura una oportunidad de progreso para todos.

¿Desde la zona portuaria ya se tiene a ese interlocutor?
Hemos asumido con toda la fuerza el espacio que nos dan las acciones de la Alcaldía en la Sociedad Portuaria, queremos demostrar que la Administración puede estar en el mundo empresarial generando desarrollo. Hoy la Sociedad Portuaria no está en su mejor momento, pero el alcalde hace parte de los que están empujando para que la entidad salga adelante porque somos dueños de esa empresa, una empresa bonaverense que debe darle grandes réditos a la ciudad.

¿Cuáles son esos dividendos al día de hoy?
En este momento estamos mal. De hecho se está debatiendo si hay o no dividendos. La empresa no está bien, pero tengo fe de que va a salir adelante, la actividad portuaria no se va acabar por los próximos años. Se deben ajustar algunas cosas desde el punto de vista administrativo de la empresa, tomar algunas decisiones para levantarla.

¿Cómo va el dragado del canal de acceso?
La información que tenemos es que el Gobierno Nacional destina recursos para los puertos del Caribe de forma frecuente, y hoy hay un debate sobre quién va a pagar el dragado de Buenaventura. Le hemos dicho a la Ministra de Transporte: si en el Caribe se draga con plata del Estado, entonces no debería ser una discusión para hacer lo mismo en Buenaventura. Como terminal marítimo, en el Distrito se produce mucho más que en los puertos del Caribe. De otro lado, hay un consenso en el sentido de que hay que profundizar el canal, en el caso nuestro estamos de acuerdo que hay que hacerlo, pero previo estudio del impacto porque estamos diciendo que en ese canal no solo se hace actividad portuaria, también se hacen actividades de nuestra tradición, la pesca, el cabotaje, el turismo, la movilización de nuestra gente, entonces hay que hacer el estudio para ver cuáles son los impactos del dragado porque hay unas ideas en muchos sectores en el sentido de que el dragado está generando mucha erosión costera. No se ha podido demostrar que así sea, pero tampoco se ha demostrado lo contrario, entonces hay que hacer el estudio.

¿Qué se va hacer con el renovado entorno de la galería José Hilario López?
Ese es el desafío que hemos asumido, si mejoramos la galería estamos estableciendo un modelo diferente entre lo público, lo privado y lo comunitario. Desde que nos anunciaron la entrega de la galería por parte de la doctora Susana Correa, directora del Departamento de Prosperidad Social, concluimos que está muy bonita pero necesitamos mejorar el entorno, y es lo que hemos hecho.
Comenzamos a pensar cómo mejorarlo, porque tenemos un pre acuerdo con la doctora Susana, que la alcaldía diseña esa recuperación del entorno y ella nos ayuda a conseguir los dineros a nivel nacional para ejecutar las obras, ese es un pre acuerdo que hicimos en el mes de enero y en eso estamos avanzando de muy buena manera, ya se pueden ver los resultados.
También hemos creado un modelo de administración de la galería a partir de una gerencia que nombra la Alcaldía, y creamos una especie de junta de coadministración en la cual participan representantes de los vendedores como una manera de escucharlos, de tenerlos en cuenta para que contribuyan a que la galería pueda salir adelante. La idea es que los recursos que se generan en la plaza de mercado sean para la galería y se inviertan en mantenimiento, limpieza, seguridad, iluminación, que la comunidad pueda ir a mercar tranquila y cómoda.

¿Qué se va a hacer con el caos de la movilidad en Buenaventura?
Es un tema complicado, tenemos un sistema de transporte público que no atina, muy informal, no tenemos una empresa bien estructurada, hay una relación atípica entre empresa, dueños de vehículos y conductores.
Los dueños de vehículos administran sus carros y contratan ellos mismos su conductor, entonces la empresa no tiene nada que ver con el conductor. Hay unas relaciones complicadas y necesitamos transformar eso, además de mejorar la infraestructura, las calles, y fomentar la cultura ciudadana y el cumplimiento de la norma en las vías.

Para finalizar, ¿qué mensaje le envía a la comunidad del distrito en estos tiempos de dificultades económicas y de salud?
Detrás de cada crisis, hay una oportunidad. Buenaventura venía en una crisis prolongada, la pandemia la agudiza, pero con mucha fe y con la fuerza que tenemos los bonaverenses estamos saliendo adelante. Vamos a llevar a Buenaventura a donde queremos, estamos seguros de ello. Vamos por buen camino.

 

En enero de 2019 entregaremos el Bartolomé de las Casas

Andrés Ramírez, gerente de la Fundación Sociedad Portuaria, explica que la apuesta de la entidad es la educación de calidad en el Distrito y por ello ha destinado los esfuerzos a la reconstrucción del colegio, que tendrá 5900 metros cuadrados, beneficiará a más de 400 estudiantes y será epicentro de programas de desarrollo para las comunidades vecinas.

Por Jesús Agualimpia

Director de Pacífico Siglo XXI

Andrés Ramírez, el gerente de la Fundación Sociedad Portuaria de Buenaventura, es un vallecaucano nacido en Cali, “feliz habitante del Distrito”, que ya tiene raíces en la ciudad y que, dice, trabaja fuertemente para ganarse la adopción.

Profesional en las ciencias administrativas a nivel pregrado y en postgrado, estudiante y docente universitario, deportista y aventurero, amante de la cultura popular, actualmente realiza dos maestrías, una en administración en la Universidad del Valle y la otra en gobierno en la Universidad Icesi.

“Afortunadamente siempre he estado al servicio del sector social como líder estudiantil, emprendedor, sirviendo en organizaciones de base comunitaria y en fundaciones empresariales como la Fundación Terpel, Fundación Alvaralice y recientemente como Director del Tecnocentro Cultural Somos Pacífico en el barrio Potrero Grande en el oriente de Cali”, cuenta.

Pacífico Siglo XXI conversó con él para conocer un poco de su vida pero sobre todo, del trabajo de la Fundación Sociedad Porturaria por Buenaventura.

¿Qué fue lo que más le llamó la atención al llegar a Buenaventura?

De Buenaventura la cultura, su gente, su exótica naturaleza. Como mestizo, en la etnia afrodescendiente, en la cultura afro y en la cultura del Pacífico, encuentro identidad y raíces que los mestizos tenemos difusas, me encantan las relaciones de familias ampliadas del Pacífico, los primos hermanos, las tradiciones, el currulao, la verbena de la Playita, su oralidad, la alegría; me encanta de Buenaventura su dignidad, identidad, el pueblo valiente, la exuberante riqueza natural, soy amante de sus ambientes naturales, sus ríos, el mar; disfruto los fines de semana en Aguaclara, San Marcos, Sabaletas, San Cipriano, las playas, me falta todavía recorrer muchos lugares, conocer todos los ríos principales así como tuve la grata experiencia de vivir un Manacillo en Juntas de Yurumanguí.

Amo también la gastronomía, el tapao, el tollo ahumado, la papa china, comprar pescado fresco en El Piñal y Pueblo Nuevo, tomar un buen curao de Lucía Solís, pasar un atardecer frente a la Bahía de la Cruz, ver a la gente jugando bajo la lluvia.

La Sociedad Portuaria de Buenaventura y su Fundación siempre han estado al lado del desarrollo social y económico de la ciudad, y lo sigue estando.

Pero su gran pasión es el trabajo social que logra hacer desde la Fundación Sociedad Portuaria. Hablemos del colegio Bartolomé de las Casas, la apuesta de la Fundación por la educación en Buenaventura.

La Sociedad Portuaria como líder del sector, como terminal portuario número uno de Colombia, tiene claro que en su ejercicio de responsabilidad social también debe realizar una gestión social sobresaliente, por eso las obras que realicemos desde la Fundación deben ser de alto impacto, calidad y pertinencia. De esta manera emprendimos hace dos años un proceso de transformación del colegio, tanto en materia de modelo educativo, así como en la planeación de la nueva sede.

¿Cuándo inicia el proyecto?

Inicia con la decidida voluntad y compromiso social de los accionistas y directivos de la Sociedad Portuaria de Buenaventura y su Fundación para realizar una inversión pertinente y de alto impacto en materia de educación para la ciudad.

La obra estará ubicada en el lote tradicional del colegio Bartolomé de las Casas que está al lado de Vista Hermosa. En este lote sembraremos una infraestructura de la más alta calidad, planteamos construir 5.900 metros cuadrados para beneficiar a 415 estudiantes de manera directa, así como las comunidades vecinas que se beneficiarán de los programas de desarrollo comunitario de la institución educativa.

¿En este momento en qué etapa va el proyecto?

El proyecto está cerrando la etapa de diseños y está previsto el inicio de la obra en el presente año, durante todo el 2018 estará en desarrollo la construcción y dotación para que en enero del 2019 le entreguemos a Buenaventura este generoso aporte de los accionistas de la Sociedad Portuaria de Buenaventura.

¿Cuál es el modelo pedagógico de la institución?

Lo estamos implementando con una alianza estratégica con la Fundación Fe y Alegría, quien hace parte de un movimiento internacional que tiene experiencia en diferentes regiones de Colombia, utilizando una pedagogía de educación popular, metodología que, por supuesto, está siendo adaptada al contexto de Buenaventura, a su identidad, hábitos, costumbres y potencialidades de la región, todo esto con una perspectiva internacional y de innovación.

Este colegio, basado en las experiencias de la Fundación Fe y Alegría y la Fundación Sociedad Portuaria de Buenaventura, busca innovar de manera controlada porque creemos que no podremos obtener resultados diferentes si seguimos haciendo lo mismo, por eso seremos pioneros en implementar la jornada única, en donde el estudiante estará mañana y tarde en la escuela. Por eso brindaremos un entorno acogedor que propicie el aprendizaje experiencial y una formación integral.

La nueva sede será un ambiente de educación en donde todos los espacios representarán escenarios de aprendizaje y sana convivencia, con la meta de formar estudiantes que tengan competencias en liderazgo, en el desarrollo social, que tengan la capacidad de formular proyectos, de resolver problemas, de convivir pacíficamente.

¿Cómo son los espacios?

Es una obra que está planteada para ser sostenible, tendrá tratamiento de aguas residuales, aguas lluvias para ser potabilizadas. Además se plantea un proyecto de paneles solares para producir energía de manera limpia, el objetivo es que sea un edificio sostenible, verde, con las puertas abiertas a los vecinos y en armonía con el entorno.

¿Que tendrá en su interior?

En su interior tendrá espacios y dotación de calidad que estará al nivel incluso de las mejores universidades de la región, como es el caso de los laboratorios para la ciencia, tecnología e innovación. Tendremos zonas para transición, primaria y bachillerato.

En las aulas radicará la principal innovación, ya que serán ambientes de aprendizaje en los que se podrán integrar dos y hasta tres grupos, ya que el espacio será flexible, por lo que se podrá ampliar y dividir conforme a las necesidades pedagógicas y curriculares.

En estas aulas los estudiantes no se sentarán en filas observando al docente como un transmisor de conocimiento, en estas aulas se ubicarán por equipos en mesas de trabajo que tendrán herramientas de todo tipo y en donde el docente será un facilitador del aprendizaje.

Le voy a contar los beneficios de este colegio para los vecinos, porque también será un espacio para el desarrollo comunitario y aprovechamiento de la ciudad, ya que tendremos un auditorio con capacidad de 250 personas, biblioteca comunitaria, talleres de artes y ciencias que también serán aprovechados por la comunidad, al igual que escenarios deportivos, por lo que digo con toda certeza que esta será una institución estrechamente relacionada con la comunidad.

Vamos a ofrecer dos laboratorios para ciencia, tecnología e innovación, un Fab Lab y un Media Lab, uno con tecnología para fabricar y elaborar y el otro con tecnología para diseñar, en uno se diseña, en el otro se fabrica. Allí los jóvenes van a estar desarrollando proyectos de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. Además de eso, se tendrán espacios para las artes escénicas y plásticas en donde los estudiantes y la comunidad podrán explorar danzas, música, teatro, pintura, entre otras.

¿Cuál es la apuesta de la Fundación Sociedad Portuaria con el colegio?

La Fundación en esta nueva etapa está buscando sintonizarse cada día más con su identidad cultural y las comunidades. Es así como en los espacios de formación tendremos una sala para artes escénicas con pisos de madera, espejos, para que los jóvenes aprendan danza, primero las tradicionales porque nos interesa que los jóvenes estén arraigados a sus tradiciones, pero también otro tipo de músicas del mundo ya que es necesaria una perspectiva internacional con arraigo local, por lo tanto, habrá formación en música, danza y artes plásticas.
También se contará con los laboratorios de ciencias naturales para física y química que van a estar integradas con los proyectos de aula.
Además tendremos espacios para liderazgo, destinado para el desarrollo de proyectos de las organizaciones estudiantiles, nos interesa propiciar que los jóvenes se reúnan alrededor de temas que sean de su interés particular para el beneficio colectivo.
Este edificio será sin duda la primera mejor impresión de Buenaventura, cualquier visitante que llegue a la ciudad, lo primero que se va a encontrar es una infraestructura de la más alta calidad como se lo merece la comunidad de Buenaventura. Pero ese caparazón necesita un corazón muy bien sustentado, que es el modelo educativo, del cual no tenemos dudas que la alianza con Fe y Alegría nos hace fuertes.

¿Y los espacios de recreación?

En estos espacios vamos a contar con dos canchas como escenarios deportivos, una cubierta y otra descubierta con gradería. Nos interesa la formación integral, por eso tendremos espacios para el deporte, la recreación, artes, lectura, pero sobre todo para la adopción de hábitos saludables.
Como los estudiantes van a estar en jornada continua, tenemos que atender las necesidades fisiológicas y posiblemente seremos el primer colegio que atienda la jornada única en Buenaventura, por lo tanto tendremos espacios de reposo activo y cafeterías saludables.

Para terminar, ¿cuál es el mensaje que usted le da a los bonaverenses, ya que muchos de ellos han considerado que la Fundación Sociedad Portuaria no está haciendo mucho por Buenaventura?

El mensaje es que la Sociedad Portuaria de Buenaventura como líder en el sector portuario tiene una apuesta indeclinable, y es que a través de su Fundación debe asumir un liderazgo y gestión sobresaliente en el sector social que debe notarse en términos de impacto, calidad y pertinencia para facilitar el desarrollo social y humano en Buenaventura.

La Sociedad Portuaria de Buenaventura y su Fundación siempre han estado al lado del desarrollo social y económico de la ciudad, y lo sigue estando.

La Fundación asume con respeto y humildad el mandato de la comunidad de Buenaventura que salió a marchar masivamente durante el paro y que nos está diciendo a las entidades públicas y privadas que lo que estamos haciendo no es suficiente para la magnitud del reto.

Lo asumimos con entusiasmo, convicción y determinación para esforzarnos y hacer más y mejor lo que hayamos hecho.
Tenemos obras importantes, se está haciendo una inversión cuantiosa, generosa, voluntaria de la Sociedad Portuaria y la estamos invirtiendo de manera juiciosa y responsable, sobre todo, técnica, con sentimiento y mucho cariño. Puedo garantizarles que se está ejecutando con amor y técnica esa inversión social de la SPB.