Está comprobado que a los pueblos del Pacífico el progreso solo llegará cuando sus gobernantes tengan conciencia que para avanzar hay que pensar colectivamente. Si seguimos pensando que esto es a partir de esfuerzos individuales, no llegará el desarrollo. Ya son más de 500 años que llevamos habitando estas tierras y seguimos por debajo de la línea de pobreza, solo superada a la de algunos pueblos africanos, Haití y otros de América.
Ya muchos lo han dicho, escritores, políticos, educadores, académicos: con el potencial que tenemos debiéramos ser una zona de constante actividad, no por cosas malas sino por la construcción de pensamientos colectivos que permitan lograr objetivos a largo plazo. El ejercicio que se hizo con el Plan de Desarrollo integral de la costa Pacífica tuvo frutos importantes a pesar de no haberse concluido. Miremos algunas ventajas y beneficios que tendríamos si trabajamos en equipo.
Turismo: para que el turismo logre el desarrollo deseado el primer paso debe ser unirse en torno a su causa. ¿Se imaginan que se creara la Corporación de Turismo del litoral, que aglutine a los cuatro departamentos, cada uno con su inventario turístico para ofrecerlo a Colombia y al mundo?
Deporte: del Pacífico han salido los mejores deportistas de Colombia. Basta con mencionar a Marino Klinger, Delio Maravilla Gamboa, María Isabel Urrutia, Freddy Rincón, Willington Ortiz, entre muchos más. Tenemos la mayor cantera para la formación de atletas de primer nivel en fútbol, baloncesto, voleibol, atletismo, boxeo. Esto amerita construir una alianza entre los dirigentes de los cuatro departamentos del Pacífico para solicitarle al gobierno nacional la construcción de escenarios deportivos y escuelas de formación. De esta manera nos convertiríamos en despensa de deportistas de talla mundial, otra fuente de progreso.
Cultura: en esta área vale la pena hacer un gran paréntesis. Nosotros somos cultura por naturaleza debido a nuestros ejes de identidad. En ese sentido tenemos mucho por ofrecer. En el canto, en el baile, en la música, en la pintura, en la poesía, en la construcción de instrumentos musicales.
Además, tenemos muchas fiestas en los cuatro departamentos, la más importante es la de San Pacho en Quibdó. Y qué decir del Petronio Álvarez, el festival de música más importante de América. También contamos con las fiestas patronales de Buenaventura, y a ello hay que agregarle una gran riqueza histórica y gastronómica. Son potencialidades que si las trabajamos en colectivo, también abren caminos para el progreso que anhela el Pacífico.